Soy Papá #10. “Papi ya tengo una mano entera”

Mi Gala celebrando su cumple en uno de sus lugares favoritos

“Papi ya mismo es mi cumple. Voy a tener 5 años (mientras te enseña la mano con todos sus dedos abiertos). Papi ya tengo la mano entera”.

Con esa frase mi pequeña primogénita me mostraba su ilusión por la fecha tan importante que se avecinaba, el 21 de agosto. Gala ya hacumplido 5 años y aún no me lo creo.

Siempre se dice que en la crianza “los días son largos pero los años cortos” y no puedo estar más de acuerdo con esta frase ya que este lustro ha pasado volando. Y, como 5 años no se cumplen todos los días pues esta importante efeméride merecía, como no puede ser menos (jajaja), unas líneas en mi querido blog con el fin de inmortalizar este momento y lo que sentimos con su celebración.

Con esta edad, ¿hay un día más importante para una niña que su cumpleaños? De hecho llevamos escuchando, desde hace más de un mes, lo que quería para su cumple. “Papi, quiero este perrito de peluche con su cestita” (sabe la pobre que tener un perro de verdad supone convencer primero a su madre jaja). “Papi también quiero este bolso y la crema de unicornio” (Ains los unicornios, ¡qué tendrán para que les gusten tanto! Pero es que me gustan hasta a mí jaja). Ya os digo, durante un mes siempre que pasábamos por la tienda había que comprobar que estos juguetes tan preciados estuvieran en sus respectivas estanterías.

Hechos como este me hacen reflexionar y comprobar que, situaciones que los adultos creemos sin importancia, para las niñas y los niños son vitales y os sorprendería saber  de cuantas se acuerdan. Aunque parezcan cosas sencillas, el que a una niña no se le olvide algo tan importante como sus regalos nos debe hacer pensar para darnos cuenta que, a pesar de su corta edad, se le quedan grabadas muchos hechos y vivencias y que, por tanto, debemos, como adultos, suministrar bonitas experiencias cargadas de cariño y de amor con el objetivo de proporcionar una adecuada inteligencia emocional.

Me decía mi profesora María Dolores Vergel que cuando escribía textos divagaba ya que quería contar muchas cosas y creo que la buena mujer tenía razón jajaja. Volviendo al cumple de mi Gala.

Miras las fotos y los vídeos desde su nacimiento y te preguntas, ¿cuándo ha crecido tanto? Y es que el tiempo ha pasado en un abrir y cerrar de ojos y no nos damos cuenta.

Parece que fuera ayer cuando no había manera que se quedara dormida, cuando daba sus primeros pasos en la Escuela Infantil con los brazos hacia arriba para mantener el equilibrio, cuando no paraba de bailar en las actuaciones de final de curso, cuando iba con su inseparable muñeco Maldini por toda la casa o cuando vivimos uno de los momentos más difíciles que fue cuando la encamaron. Fue muy duro verla tan pequeña con la vía puesta.

Pero pasan los días y se nos van haciendo mayores. Aquellas palabras que antes no pronunciaba bien ahora las dice a la perfección, domina sus movimientos corporales (aunque siempre he dicho que mi peque tenía muy buena psicomotricidad) y te hace unas preguntas y unas reflexiones que te dejan a cuadros.

Y es que mi niña, además, es muy buena (se que suena a típico que veamos a nuestras hijas e hijos como los mejores del mundo pero tiene muy buen corazón), busca jugar e integrarse con los demás y, lo más importante, se desvive por su hermana pequeña. Ahora entiendo mucho más a mi madre que nos decía desde pequeños que mis hermanas y yo nos teníamos que querer siempre y que nunca nos debíamos pelear.

Cariño, ya mismo podrás leer este texto y te queremos decir tanto tu mamá como yo que gracias a tí pudimos entrar en el maravilloso mundo de la paternidad, que gracias a tí aprendemos día a día lo que es ser mamá y papá y que gracias a tí somos las personas más afortunadas y felices del mundo.

Te queremos mi vida.