A ti, a lo que fuiste y lo que serás... ¡hasta siempre Eddy Barcan!

 Desde bien pequeño he estado inmerso en la historia de la música de los años 60 y 70 de nuestro país gracias, entre otras personas, a mi madre. Ella ponía en la minicadena de casa la una colección de CDs del programa “Canciones para el Recuerdo” que se emitía en Canal Sur y que presentaba Consuelo Berlanga.

Eddy Barcan con la guitarra en mano

Grupos como Los Brincos, Los Bravos o Los Puntos y cantantes como Pablo Abraira, Camilo Sesto o Cecilia iban a formar parte de mi vida.

Desde hace una década iba a aumentar el conocimiento sobre más autores de la época. Uno de ellos fue Joe Dassin. A este gran compositor estadounidense y francés que cuya notoriedad musical destacó en las décadas de los 70 y de los 80 y autor de temas tan importantes como. “A ti”, “El amor se va” o “Et si tu n´existais pas” no lo habría descubierto nunca si Eduardo Barbero no se llega a cruzar en mi camino.

Fue justo hace 10 años cuando conocí al propio Eduardo y Beatriz Moreno ya que eran tíos de Mónica (chica con la que había empezado a salir y mi actual pareja). Este matrimonio vivía en Huétor desde hacía décadas y eran dueños del Karaoke Las Chinas. Amaba la música francesa, tanto es así que su otro karaoke, el de la capital, se llamaba Papillon (mariposa en francés), como el clásico del cine protagonizado por Steve McQueen y como el legendario Henri Charrière.

Fue un precursor del karaoke no solo en nuestro pueblo sino en toda la provincia y es que Eduardo era un apasionado de la música, era un artista con mayúsculas y en el sentido más amplio de la palabra ya que a sus grandes dotes con la música, donde tocaba varios instrumentos y cantaba, se unía sus habilidades con el mundo de la magia y de la pintura. Todo ello bajo el nombre artístico de Eddy Barcan.

Eduardo desplegó su arte en el mundo musical por distintas partes del planeta, era un trotamundos, vivía muy intensamente todo aquello que amaba.

Él era pura alegría y felicidad y, por ello, cada segundo de su vida lo dedicaba en sacar una sonrisa a los demás. Recuerdo como con un simple papel y varios rotuladores creaba dibujos espectaculares para sus sobrinos, como buscaba esos momentos en familia donde siempre me decía: “Chus, este es el verdadero sentido de la vida, la familia. No hay más”. O incluso mirando hacia atrás, en los momentos más duros de la pandemia, no dudó en coger su micrófono, el móvil y sus canciones y dedicarnos todos los días un tema para alegrarnos en esos momentos tan difíciles.

Miro hacia atrás y recuerdo con enorme nostalgia ese dúo perfecto a los micros con Beatriz cantando el “Et si tu n´existais pas”. Y es, en este momento, cuando piensas que en realidad la persona importante no era Joe Dassin sino quien te hizo que la descubrieras y disfrutaras de sus letras.

Se nos ha ido el músico, el mago, el pintor, el marido, el tito pero, sobre todo, se nos ha ido una magnífica persona cargada de luz cuya vida fue ir emitiendo acordes y notas de alegría allá por donde iba. Se te va a echar mucho de menos.